...EL LÁPIZ DE FRAN...

Ya sé que te prometí no dejarte sola nunca, que te amaría siempre y que no dejaría de quererte como te quiero. Sé que te prometí, hacerte feliz toda mi vida, que sonreirías cada mañana, cada atardecer...
Pero tengo que romper una de mis promesas...tendré que dejarte sola. Pero no te entristezcas, porque aunque me voy muy lejos, me voy para siempre, pues el destino así lo ha querido y mi tiempo se termina. Allá donde tengo que ir, estaré bien y veré a mis parientes, parientes que tuvieron que marcharse antes que yo. 
Esté donde esté, no dejare de amarte como te amo, no dejaré de quererte como te quiero. No desesperes mi amor, pues todas las noches te visitaré, aunque echaré de menos esas caricias, echaré de menos besar tus labios tan dulces como el algodón de azúcar. Vaya donde vaya, siempre te llevaré con migo.
Cuando yo me haya ido, y acudas a verme, por favor no te dejes abatir por los recuerdos, por todos los momentos vividos y sonríeme, que aunque no pueda verte, si sonríes, si sufres, lo sentiré en mi corazón.
Adiós amor de mi vida, dame tus manos por última vez, mírame y bésame, para así llevarme parte de ti con migo. 
Hasta siempre mi hermosa flor.

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